1731 Juan Merino Marchante, padre del P. Andrés Merino de Jesucristo

Gaurko ekarpena P. Andrés Merino de Jesucristoren aitari buruz da.

firma

El P. Andrés Merino de Jesucristo es uno de los hijos más ilustres de la villa; pero pocos datos tenemos de su vinculación con la misma. Sólo su partida de bautismo de 1730, con lo que asevera que nació en Elciego y las dos anteriores de sus hermanos Juan Francisco (1725) y Damiana (1728).

El matrimonio Merino Erigoyen se estableció en Elciego por un espacio corto, durante el cual nacieron estos tres hijos. No teníamos ninguna referencia relativa a la actividad o la razón por la que se asentaron en la villa; por esto  traemos hoy esta aportación al blog.

En el contrato del Barco de 1731, aparece Juan Merino como rematante del servicio por el precio de 45 ducados. En ese contrato estampó su firma, algo que ya nos indica que sabía leer y escribir. Y si miramos el trazado de la misma, llegamos a la conclusión que Juan Merino Marchante era persona que gozaba de instrucción básica.encabezamiento

El barco se hizo nuevo en 1729, a cargo del carpintero de Cenicero Juan de Osa, por un precio de 1.150 reales.  Este año de 1731 los vecinos naturales, moradores y caballerías de la villa cruzaron el río Ebro a través del barco sin abonar “ estipendio alguno”; no así los forasteros que tenía que abonar un cuarto por cabeza. Siempre que el río no tuviera crecida.

1792 La construcción del Puente hacia los Barrancos y San Vicente

Gaurko egunetan zubia da Ebro ibaia zeharkatzen duena; bainan aurreko mendeetan beste zubi batzuek garrantzia izanten zuten.

total

A las personas que hemos habitado Elciego desde el último tercio del siglo XIX, si hablamos de “el puente” sólo tenemos una referencia: nuestro puente, el del río Ebro. Pero las personas que vivieron en la villa desde hace más de siglo y medio, sus referencias eran las de los dos que facilitaban el paso del “Río Mayor”. Tampoco hay que olvidar que había otros pasos del río Mayor, el río Valle o el riachuelo San Pedro. El de Barrihuelo encauzaba el tránsito de personas, animales y carruajes desde el propio casco urbano hacia los mesones, las cuevas, Laguardia, Logroño y toda la jurisdicción establecida en la margen izquierda del río Mayor. El otro puente era el que ahora llamaríamos de “San Vicente”, “Riscal”…pero que en siglos anteriores era el de “Los Barrancos” o el que va hacia la ermita. Sobre este último es al que nos vamos a referir.

A finales del XVIII el interés por mejorar las comunicaciones entre las poblaciones fue uno de los intereses mayores de los gobernantes. En muchos casos era anchar una senda de herradura para facilitar el paso de carruajes. La modernidad lo exigía.

El camino que transitaba desde el pueblo hasta el barco, para poder cruzar el río Ebro, era una de las vías más utilizadas e importantes. La salida desde la población se iniciaba a través de la calle que aún conserva su nombre “Calle del Barco”.

En 1791 se planteó el Concejo construir un puente moderno, amplio y que tuviera unos buenos accesos a través de una moderna calzada, para acceder más cómodamente al barco. Para ello comisionaron a tres personas, una perteneciente al Cabildo Eclesiástico ( Joaquín Ibáñez Ruiz de Ubago) y otros dos del estamento civil (Joaquín Martínez de Villarreal y Joaquín María Martínez de Villarreal). Como era preceptivo, establecen unas condiciones y por medio de bando anuncian un remate o subasta de la obra. Se hace con ella Francisco de arrietaArrieta, maestro de cantería, residente en la villa, pero del que apenas tenemos datos de su actividad en Elciego. El 5 de agosto de 1791 se hace el contrato para “hacer y fabricar de nueva planta un puente en el Río que nominan los Barrancos…y una calzada” que enlace con la que hay hecha en el camino del Barco. Todo por un precio de 7.040 reales vellón. Las condiciones indican la línea del trazado, los materiales a emplear, el grosor de las pavimentaciones, la composición de las mezclas de los morteros (donde habla de la mezcla de Mr Loriot, una de las autoridades académicas de la segunda mitad del XVIII sobre morteros), el barandado del puente, el arco del puente, ….Todo rematado para el día de San Miguel (29 de septiembre) de ese mismo año.1791

Muy dura debió parecer la obra al cantero Arrieta, o el plazo era excesivamente corto; puesto que al año siguiente, se remata nuevamente la construcción del puente y calzada con condiciones parecidas; pero más detalladas en cuanto a aspectos técnicos.

Los anteriores comisarios sacan la obra a remate siguiendo el protocolo habitual y se acuerda el 25 de noviembre de 1792 con otro cantero más establecido en Elciego como fue Ibarzábal. Andrés Ibarzábal Unzueta era natural de Eibar y estuvo casado con la vitoriana Cipriana Ortiz de Guinea. Cinco hijos de este matrimonio nacieron en Elciego, desapareciendo pronto el apellido en la villa, ya que fueron hijas las que continuaron residiendo en el pueblo. El matrimonio Ibarzábal falleció en 1818, con tres días de diferencia entre uno y otro; sumidos en pobreza, tal y como indican los detalles del entierro.1792

Volviendo al puente, que en este contrato lo especifican como “un puente nuevo y una calzada en el camino que llaman del Barco, que es por donde se va a la Villa de Cenicero…” se establecieron las siguientes condiciones:

1.-La mampostería a 17 reales cada estado y la compuesta con cal y mortero a 33 reales cada estado. La bara de sillería del puente a 4’5 reales, siendo por cuenta del Maestro el poner la cal, tierra y demás que sea necesario.

2.- El trazado de la calzada tendrá 484 pies.figura-1

3.- Se trazarán dos paredes de mampostería para encauzar los accesos y que estarán a 14’5 pies de distancia, que es lo que tendrá el ancho del camino.

4.-Estas paredes se asentarán en línea vertical inclinada, lo que comúnmente se denomina “arreste”

5.- Las paredes serán de mampostería “a hueso”, poniendo pasaderasfigura-2

6.- Por el sitio donde cruza “el reajo del Valle”, se hará un puente de 10 pies de ancho en su vano y 8 de diámetro de medio punto.

7.-.Harán el terraplén y horizontación de los terrenos.

8.-El pavimento se encalzará de canto de mampostería de diez onzas de altura, con doce onzas en su punto céntrico, rellenado de arena y grijo, “bien pisado y apisonado

9.-Se pondrán 34 para ruedas y 17 a distancias proporcinados.figura-3

10.- Se hará una alcantarilla de mampostería con sus tapas correspondientes que atravesará el camino para suministrar regadío en las heredades y “riego de la viña

11.- La bara de sillería el arco.

12.- Se concluirá la obra para el 1 de junio de 1793, siendo inspeccionada por maestros canteros.

13.- Se medirá todo lo construido y si sobrepasa los precios estipulados, se abonarán a maestro cantero.

(Archivo Histórico de Protocolos de Alava (AHPA).-  Manuel Ramírez Prot 7764 y Prot 7765)

El último Barco de Elciego.- 1861

Aurreko mendeetan Ebro ibaia pasatzeko, ontziak edo gabarra erabili zuten. Azkena 1861garren urtean hondoratu eta desegin zen.

Sin título(Archivo Provincial de la Diputación de Alava.-Armario 25, legajo 11, nº26)

A lo largo de los siglos precedentes, el paso del río Ebro a la parte de Castilla, se realizaba a través del barco que estaba situado en las proximidades del actual puente. Los puentes de Logroño y de San Vicente de la Sosierra eran los dos conductos más utilizados para el paso de mercancías de una margen a otra. Pero había también puntos intermedios donde, por medios de barcazas y otros artilugios, se solucionaba el tránsito de personas, caballerías y pequeñas mercancías de una provincia a otra. El caso del nombre de La Puebla de La Barca, es un testigo más de barcos y barcazas empleados para cruzar el Ebro.
En el caso de Elciego, el barco era una herramienta importante en la vida cotidiana; y como tal, el Ayuntamiento era el propietario del mismo, arrendando anualmente su usufructo por medio de un remate. Como vestigio de esta actividad, tenemos la calle del Barco, que desde la Plaza mayor se encaminaba hacia el camino que conducía al río Ebro. La trazado de la carretera actual es fruto de la construcción del puente en 1862, siendo el camino antiguo al barco el que discurre paralelo al Río Mayor, atravesando la zona de los Barrancos y la Fuente del Fraile hasta la desembocadura en río Ebro.
Los movimientos y las negociaciones de los caminos de hierro o ferrocarriles y su travesía final por la margen derecha del Ebro, suscitaron en las autoridades locales y forales proyectos para facilitar el acceso cómodo de las mercancías al transporte ferroviario. Uno de ellos fue el inicio de la construcción de un puente que uniera la Rioja Alavesa y la nueva estación en el término de Cenicero en 1862.
El hundimiento por deterioro del barco de Elciego el 21 de diciembre de 1861, hizo que el Alcalde Román Ramírez pusiera el hecho en conocimiento del Diputado General para acelerar aún más la construcción de un puente de piedra.
Dice así el escrito:
“Elciego 21 de Diciembre de 1861
Sr. Diputado: en la mañana de este día se ha encontrado el barco de este pueblo del río Ebro sumergido en su fondo sin otra causa que el estado de deterioro en que se halla.
Aunque piensa este Ayuntamiento hacer en dicho barco, caso de poder extraerlo del fondo del agua, una suposición, nunca será duradera y solo sí paliativa, a no ser haciendo otro barco nuevo que consumiría, a no dudarlo, una porción de miles a los fondos municipales sin sacar los productos que pudiera dar.
Esta ocurrencia la pongo en conocimiento de Vd sin más objeto que ponerlo al alcance de su ilustración y con este motivo se pone a las órdenes de Vd su más atento y seguro servidor
El Alcalde.-Román Ramírez”